Qué difícil me resulta siempre hablar sobre Ghost. O mejor dicho, qué difícil me resulta siempre hablar sobre Ghost de forma objetiva, ya que estamos ante uno de mis tres grupos favoritos en el ámbito rock / metal de todos los tiempos. Pero vamos a intentarlo.
Tobias Forge y sus chicos están de vuelta cuatro años después de su genial Prequelle (2018), y vuelven por la puerta grande. Es cierto que entre medias no han estado precisamente parados, ya que han ido lanzando singles a cuál más interesante, pero sus acérrimos fans pedíamos más. Y qué forma de volver. El combo sueco se sale de su zona de confort más que nunca, explorando sonidos y territorios nunca tocados anteriormente, y me atrevería a decir que incluso peligrosos por los fans más puristas, pero salen bien parados como es costumbre en ellos. Más adelante desarrollaré el asunto de forma más detallada.
Pero, ¿qué nos vamos a encontrar en este álbum?
Evidentemente el sonido característico que Ghost ha ido desarrollando a lo largo de su cada vez más extensa carrera está ahí. Ese genial sello que mezcla a la perfección rock clásico, melodía, coros pomposos, pop de excelsa calidad y sonidos más pesados cercanos al metal. Vemos ese toque de oscurantismo tan característico y temáticas cercanas al cine y series de terror de los 80, el cual sigue estando latente.
Pero ojo a este IMPERA, que va mucho más allá. El trabajo vocal de Forge alcanza su culmen en este plástico, las letras dan una vuelta de tuerca y encontramos los coros más completos y elaborados de su discografía. Los arreglos orquestales y coqueteos con géneros tan alejados del rock, diría que en sus antípodas, harán acto de presencia. Todo esto encaja de forma orgánica a la perfección. Pero como dije anteriormente, más adelante daré las pertinentes explicaciones.
Análisis tema a tema
Imperium es la encargada de darnos la bienvenida. Una pieza instrumental, tranquila, sosegada, donde la guitarra es la principal protagonista.
Y seguidamente y sin pedir permiso, nos aborda Kaisarion. Un tema de pop-rock melódico sorprendentemente alegre y luminoso para tratarse Ghost. La guitarra ultramelódica contrarresta a unos coros más propios de ceremonias litúrgicas que de un tema rockero, pero todo encaja a la perfección.
Los teclados al más puro estilo Bon Jovi de los 80s nos abrazan en el comienzo de Spillways. Otro tema bastante luminoso, donde curiosamente lo más oscuro es su letra. Volvemos al hard rock tremendamente melódico y pegadizo, donde los coros y la guitarra nos recuerdan poderosamente a los míticos Queen. Palabras mayores, como el comienzo de este IMPERA.
Y si creíais que este trabajo no podía ir a mejor, llega uno de los mejores cortes paridos por la factoría Ghost. Call Me Little Sunshine es una pieza que nos recuerda poderosamente a Cirice. Potente, pesado, oscuro, pero con una melodia vocal y de guitarra que lo transforman en un clásico instantáneo. Encajaría a la perfección en Meliora sin la más mínima duda.
Hunter’s Moon es una canción que juega al despiste. Y es que alterna a la perfección ritmos pausados con otros mucho más frenéticos. Acordes de guitarra acústica con potentes riffs eléctricos. El teclado de fondo aparece poco, pero en el momento adecuado para generar una atmósfera mucho más misteriosa, y es que esa sería la definición correcta de este corte. Misterioso, donde la letra, una vez más, tiene un papel importante. Eso sí, el trabajo de Tobias y de los coros superpuestos en este caso es pura delicia sonora. No por causalidad fue uno de los singles escogidos por el combo sueco.
Y con Watcher In The Sky llegamos a uno de los temas más metaleros de toda la carrera de Ghost. Un riff eminentemente heavy es el eje central del tema, el cuál nos recuerda significativamente a esos geniales comienzos en la etapa de Opus Eponymous. Es curioso que para tratarse del corte más metalero del redondo, es uno de los más pegadizos. Deseando disfrutarlo en directo.
Dominion es una pieza instrumental muy breve, pero oscura, pesada e intensa. Instrumentos de viento que parecen más bien sacados de cualquier liturgia tan propia de las santas fechas que se nos avecinan, que de un disco de rock o metal.
Y llegamos al tema de la discordia: Twenties. Nunca una canción de Ghost generó tanta división de opiniones. Abriendo el tema, y continuando con la anterior Dominion, instrumentos de viento nos dan la bienvenida. Pero seguidamente un ritmo de batería muy simple y repetitivo, para los más mal pensados, más cercano al reggaeton que a cualquier género rockero, se encarga de llevar el peso del corte. Eso sí, el sólo de guitarra es uno de los más destacados del álbum. Y ojo a la letra, cualquiera diría que habla más de la sociedad actual que los años 20 del pasado siglo. Un tema que no deja indiferente a nadie, y que dudo mucho que un genial músico como Mr. Forge lo haya hecho por casualidad.
Continuamos con la joya de la corona. Con el mejor tema de este IMPERA, y por qué no decirlo, con uno de los mejores cortes paridos por Ghost, y de lo mejor facturado en todo 2022 hasta la fecha. Darkness At The Heart Of My Love es un tremendo baladón que no hace más que corroborar que, a día de hoy, pocos músicos le tosen al señor Forge en lo que a calidad de composición se refiere. Qué feeling. Qué letra. Qué guitarra. Qué forma de tocar la fibra y de quedarse martilleando tu cabeza una y mil veces. Quien pueda, que empate.
En Griftwood vuelve el hard rock de corte eminentemente melódico, y que hará las delicias de seguidores de agrupaciones como WET, Mr. Big o Talisman, y eso son palabras mayores. Se adentren en el género que sea, siempre salen victoriosos. Qué línea de bajo y de guitarra, caviar sonoro para los paladares más exquisitos. Y qué coros, de los más destacados de todo el LP.
Cerrando el tridente de piezas instrumentales, Bite Of Passage se entiende mejor como una breve introducción al último corte del plástico que como un tema en sí mismo.
En Respite On The Spitalfields estamos ante la canción más larga y elaborada de todo este majestuoso IMPERA. Un tema denso, a priori entendiendose como medio tiempo, pero con subidas y bajadas que hacen de él toda una montaña rusa de sensaciones sonoras. El teclado es íntimo, pero preciosista, en su justa medida. Los puentes del tema, que conectan las distintas partes del mismo como si fuesen pequeños temas dentro de otro mucho más grande, coquetean con el rock más progresivo y elaborado, dando lugar a una mezcla apasionante y que nos dejan a los Ghost más profundos que recuerdo. Una forma brillante de acabar con un trabajo de sobresaliente.
Conclusión
Hace unos días debatía con otros redactores de RiffValley sobre quiénes serán los que tomen el relevo de los grandes dinosaurios cuando estos se vayan retirando. Aparecieron diversos nombres, pero el más repetido sin duda era Ghost. Eso, con «sólo» cinco discos de estudio, lo que es sinónimo de la trayectoria meteórica que están llevando a cabo.
Este IMPERA viene a apuntalar esa trayectoria. Su trabajo más elaborado, más alejado de su fórmula y zona de confort, y que resuelven de forma sobresaliente. Sabemos de dónde vienen, y sabemos dónde están ya, encabezando festivales de primer nivel a lo largo y ancho del globo. Pero con su peculiar forma de entender el rock, sólo nos queda esperar y observar si llegan al Olimpo reservado a los más grandes de la historia. Sientense, y disfruten del viaje, que está siendo algo mágico.
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